Elsa Muñoz

Nací en un México periférico, crecí en ambientes sociales donde lo surreal era lo cotidiano en medio de la realidad esquiva. Una calle solitaria, inacabada, huidiza; una casa avejentada o una habitación en penumbra fue la estética que modelo mi visión.

Llevé a cabo estudios superiores de psicología, que nunca ejercí a fuerza de desconciertos vitales. El flujo de la vida me llevó a concluir estudios superiores en enseñanza de lengua extranjera para ejercer de manera dubitativa debido al llamado persistente del arte. Laboré por muchos años en educación y dediqué mi tiempo libre a desarrollar mis sueños artísticos. Después de cursar talleres de pintura, escultura, modelado y talla en madera, me encontré en la encrucijada de la docencia o el oficio del artista. 

Dibujo, pintura y modelado en diferentes medios fueron mis terrenos de asidua presencia en tardes y noches etéreas. Sin embargo, la forma y el objeto se fueron apoderando de mis aspiraciones, concretando en el modelado, el trazo y la escultura. El llamado persistente del arte y horas de terca reflexión me llevaron a la decisión de dejar la educación y centrar mis esfuerzos en el arte. Finalmente, me centré en la escultura y me instalé en un proceso autodidacta.