MIGUEL MILLÓ nace en México, viviendo su infancia entre Tijuana, San Diego y la Ciudad de México. Ha construido imágenes con el que hace escultura, volumen y color. Son elementos plenos, ambos manejados con total libertad, lo que deja ver una expresión llena de inquietudes, las mismas que revelan sus propios dioses y monstruos. Utiliza la naturaleza para vestirse con ella y haciendo de esta, la protagonista de su obra. Mujeres de barro decoradas con naturaleza y bañadas en luz que se conjuntan en una explosiva expresividad, que resulta, además, de vistosa, sumamente emotiva.
Estudia Diseño Gráfico en la Universidad Iberoamericana de Tijuana. Para él, la creación es una obsesión; su fascinación es crear composiciones artísticas con todo lo que le rodea, explotando al máximo el lenguaje de la naturaleza, especialmente el que le ofrecen las formas rebuscadas y expresivas.





